Expertos de Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, Panamá, Uruguay, así como representantes de FONTAGRO, Global Methane Hub, IICA y FLAR, se reunieron del 11 al 13 de marzo en Chillán, Chile, para compartir experiencias y discutir sobre la producción sostenible de arroz y la reducción de emisiones de metano en Latinoamérica.
Según Karla Cordero, investigadora del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) – Chile y organizadora del evento, el objetivo principal de este encuentro fue conocer las estrategias implementadas, en los países participantes, para la producción sostenible de arroz, así como explorar nuevas formas de colaboración para el futuro. “Pudimos conocer diferentes enfoques, como las rotaciones y la medición de gas metano con pastoreo. Además, durante las jornadas de campo en las estaciones experimentales de INIA San Carlos e INIA Parral, mostramos campos arroceros chilenos donde se llevan a cabo experimentos con diversas metodologías, como la siembra directa en seco e inundación, pregerminado y la innovadora metodología de arroz climáticamente inteligente o SRI. En este último, estamos midiendo las emisiones de metano para evaluar el impacto en la mitigación de emisiones y el ahorro de agua”, destacó Cordero.
Una de las presentaciones más relevantes fue la de Eduardo Graterol, director ejecutivo del FLAR, quien abordó la optimización del mejoramiento genético y la agronomía de procesos para mejorar la productividad y sostenibilidad en los cultivos de arroz en Latinoamérica.
Jaspe FL INIA: como anillo al dedo
Durante las visitas de campo se destacó una protagonista bien conocida por el FLAR: Jaspe FL INIA, la primera variedad de arroz originada por el FLAR y liberada por el INIA Chile, diseñada para satisfacer las necesidades de quienes producen el arroz más austral del mundo. A casi dos años de su liberación, esta variedad ha demostrado ser crucial para mejorar la sostenibilidad de los productores chilenos.
Karla Cordero explica cómo Jaspe FL INIA ha optimizado la producción en condiciones adversas: “Esta variedad tiene características excepcionales para nuestra región. En un entorno con una ventana de siembra limitada y poca disponibilidad de agua, esta variedad viene como anillo al dedo, ya que reduce el ciclo productivo en casi 30 días, lo que permite una mayor flexibilidad en la siembra, permitiendo que se establezca incluso en noviembre. Esto es esencial para enfrentar las primaveras lluviosas y seguir produciendo altos rendimientos, además de reducir hasta un 50 % del agua utilizada en el cultivo convencional”, destacó Cordero.
Los beneficios de Jaspe FL INIA fueron confirmados por el productor y empresario Ramón Henríquez: “Hemos observado que la variedad es de 15 a 20 días más precoz que las variedades tradicionales, como Zafiro. Esto nos ha permitido ahorrar agua, reducir el vaneamiento y obtener una mayor cantidad de grano entero”.

Un futuro prometedor a través de la colaboración
El trabajo conjunto entre FLAR y el sector arrocero chileno no solo ha resultado en la liberación de una variedad innovadora, sino también en la difusión de tecnologías y conocimientos que fortalecen la colaboración entre instituciones del sector público y privado.
Eduardo Graterol destacó que el enfoque de la sostenibilidad que promueve el FLAR, tiene como principio fundamental la agronomía de procesos, que busca producir más arroz con menos insumos, menos costos y menor impacto ambiental.
Ramón Henríquez comparte su experiencia con la implementación de nuevas tecnologías: “Empezamos con la introducción de la siembra directa en 50 a 100 hectáreas, y rápidamente vimos los beneficios. Antes utilizábamos el sistema de pregerminado, lo que requería entre 20 a 24 mil metros cúbicos de agua por hectárea. Ahora, con la siembra directa, usamos alrededor de 12 mil metros cúbicos, lo que representa una mejora en la eficiencia del 40 al 50 % en el uso del agua“.
Este caso de éxito demuestra cómo la colaboración entre FLAR y sus miembros en Chile y otros países de la región, ha logrado avances significativos en la sostenibilidad y la eficiencia en la producción de arroz, abriendo nuevas oportunidades para el sector arrocero de Latinoamérica.

“JASPE FL INIA tiene características excepcionales para nuestra región. En un entorno con una ventana de siembra limitada y poca disponibilidad de agua, esta variedad viene como anillo al dedo, ya que reduce el ciclo productivo en casi 30 días… Esto es esencial para enfrentar las primaveras lluviosas y seguir produciendo altos rendimientos, además de…

“El enfoque de la sostenibilidad que promueve el FLAR, tiene como principio fundamental la agronomía de procesos, que busca producir más arroz con menos insumos, menos costos y menor impacto ambiental”.

“Empezamos con la introducción de la siembra directa en 50 a 100 hectáreas, y rápidamente vimos los beneficios. Antes utilizábamos el sistema de pregerminado, lo que requería entre 20 a 24 mil metros cúbicos de agua por hectárea. Ahora, con la siembra directa, usamos alrededor de 12 mil metros cúbicos, lo que representa una mejora…