
A finales de 2005 Gonzalo Zorrilla aceptó el desafío de la dirección ejecutiva del FLAR y con este, el reto de cambiar su apacible vida en la ciudad de Treinta y Tres en Uruguay para trasladarse a Colombia y convertirse un poco en ciudadano Latinoamericano, debido a sus constantes viajes por la región. En 2009 regresó parcialmente a su país natal y desde allí continuó la dirección del FLAR. En octubre de 2012, Gonzalo Zorrilla anunció al Comité Administrativo del FLAR su decisión de “reinstalarse en Uruguay” y aceptar la Dirección del Programa Nacional de Investigación en Arroz del INIA-Uruguay. Desde entonces empezó a preparar la culminación de su etapa como Director del FLAR y acompañó el proceso de selección de Eduardo Graterol como su sucesor.
A continuación publicamos dos mensajes con los que se despidió de la comunidad FLAR y CIAT, respectivamente:
“Estimados integrantes del FLAR: Como es de vuestro conocimiento estas semanas de marzo hemos estado haciendo la transición de la Dirección del FLAR con el Dr. Eduardo Graterol, con quien hemos estado trabajando juntos desde principios del mes. La tarea ha sido sencilla ya que Eduardo conoce perfectamente el FLAR y llega con un entusiasmo y energía que no solo le permitirá asumir la Dirección sin sobresaltos, sino que augura una nueva etapa de realizaciones para el Fondo. Han sido siete años intensos en los cuales espero haber aportado mi granito de arena al desarrollo arrocero de la región y en los cuales aprendí un montón. Seguiremos en contacto desde mi nueva posición como integrante de la representación de Uruguay en el CA del FLAR. Aprovecho para desearle el mejor de los éxitos a Eduardo en su nueva gestión. Un abrazo“.
“Estimados amigos de la comunidad del CIAT: a fin de marzo finalizo mi contrato como Director del FLAR y este jueves retorno definitivamente a mi país, en donde tendré la responsabilidad de dirigir el Programa Nacional de Arroz del INIA Uruguay. No puedo pensar en una mejor culminación de esta etapa profesional, volviendo mi a casa, a mi familia y con tiempo de trabajar nuevamente para los arroceros uruguayos, fortalecido por la experiencia adquirida. Quiero decirles que estos siete años han sido intensos y fascinantes y dejan una marca indeleble tanto en mi como en mi familia. Colombia y los colombianos nos han hecho sentir parte de este increíble país que ya es nuestra segunda casa. He disfrutado cada día de trabajo en esta comunidad científica vibrante que es el campus del CIAT. Extrañaré la posibilidad de intercambiar conocimientos y experiencias con científicos y técnicos de todas las disciplinas y de todos los lugares, ya sea en los seminarios formales, en el snack, el kiosco o a la sombra de los árboles del parqueadero. Extrañaré también los buenos momentos compartidos con tantos amigos y amigas que he ido haciendo en las diversas actividades sociales y deportivas del Centro. Esto no es una despedida ya que seguiré como miembro del FLAR y por lo tanto estaré regresando de cuando en cuando. Pero sí es el momento de decir con el alma MUCHAS GRACIAS! al sinnúmero de personas con las cuales tuve que trabajar y compartir en estos años y con las cuales siempre encontré apoyo y comprensión. Sólo me queda decirles que tienen un amigo en Uruguay y allá los espero en Treinta y Tres (así se llama mi pueblo…) con un buen asado. Un abrazo a todos“.