Fuente: Diario Extra
23/08/2011
– El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) se cansó del estire y encoje en torno a la situación del arroz. Ayer por la tarde en la comisión de alto nivel que analiza el tema se tomó la decisión de aplicar sanciones a las industrias que no reciban el excedente de la cosecha.

Antes de emprender procesos administrativos se va a realizar una inspección en cada empresa para comprobar su capacidad de recibo y aquellas donde se compruebe que hay espacio se verán expuestas al castigo.

La Corporación Arrocera Nacional (Conarroz) se encargará de notificar a las empresas. Se estima que en este momento, cinco de las 13 industrias se niegan a aceptar más arroz.

De acuerdo con el vicepresidente de la Corporación Arrocera Nacional (Conarroz), William Ureña, el Consejo Nacional de Producción (CNP) habilitó cuatro las plantas de recibo. Se trata de La China, Barranca, Liberia y Térraba. Sin embargo, al problema de almacenamiento se suma la falta de secadoras. Consultado acerca del por qué Conarroz aún no pone a disposición de los productores secadoras para el grano, Ureña respondió que ese es un asunto de legalidad. “Conarroz no puede ir a comprar secadoras así porque sí. Nosotros se lo dijimos al gobierno, la Corporación no puede invertir en bienes de terceros, hay que hacer una reforma legal”, explicó.

El presidente de la Asociación Nacional de Industriales del Sector Arrocero (Aninsa), Rolando Brenes, indicó en una conversación con DIARIO EXTRA, que aunque las empresas están ayudando existe un límite de capacidad, e instó al MAG a ordenar la producción para que no se produzcan excedentes.

Precio internacional muy bajo

La ministra de Agricultura y Ganadería, Gloria Abraham, manifestó ayer que hay un incremento en la producción de 14 mil hectáreas, lo que se traduce en 35 mil toneladas más de arroz, cuya mayoría no tiene contrato de recibo con los industriales.

El gobierno acordó con los industriales no tocar el precio del arroz al consumidor hasta que se resolviera el juicio en el Tribunal Contencioso Administrativo, sin embargo, existe espacio para ello a raíz del ingreso del contingente de los Estados Unidos. “Podríamos revisar el precio sobre la proporción del arroz importado”, agregó.

En caso de que el gobierno revise el precio a la baja, los industriales terminarían vendiendo a un precio menor al costo de producción. Abraham, dijo que la importación de arroz blanco actualmente es un buen negocio, que el precio al nivel internacional está a la baja.