Nicaragua – Abundancia en Jalapa
En el llamado Fértil Valle de Jalapa se estableció el invierno hasta el 13 de junio, cuando muchos con la fe en San Antonio decidieron sembrar “en seco” en espera de las primeras lluvias.
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En el llamado Fértil Valle de Jalapa se estableció el invierno hasta el 13 de junio, cuando muchos con la fe en San Antonio decidieron sembrar “en seco” en espera de las primeras lluvias.
Agricultura y productores arroceros consensuaron el 25 de julio pasado planificar la siembra del cereal en todo el país, con miras a que el sector sea más competitivo ante el reto que representa el Tratado de Libre Comercio de Centroamérica, Estados Unidos y República Dominicana.
Tras varios años en que la falta de insumos, las limitaciones con la maquinaria, las dificultades con la aviación y hasta el clima, habían venido afectando la actividad arrocera, por fin la producción de este importante cereal comienza a dar señales reales de recuperación.
La producción del grano apenas alcanzará las 300 mil toneladas, similar al año pasado, con lo que habrá que importar para cubrir la demanda nacional de casi 500 mil toneladas.
El proceso se inició en el 2004 y cumplió con varias etapas y evaluaciones.
Los productores de arroz están deseosos de ingresar al sistema de producción bajo riego, con el fin de llegar a triplicar la producción de este cereal a corto plazo, cubriendo de esta manera la demanda interna de 400.000 toneladas al año y obtener excedentes para la exportación.
La nueva instalación, que abarca cuatro hectáreas, dispone de una inversión de un millón 500 mil dólares para la primera fase de su proyecto y el equipamiento y los laboratorios con tecnologías más avanzadas.
Argentina exportó alrededor de 296.950 toneladas de arroz en los primeros cinco meses de 2014, un aumento de aproximadamente el 44% en comparación con las 206448 toneladas de arroz exportadas durante el mismo período del año pasado, según datos del Ministerio de Agricultura de Argentina.
Pérdidas se mantienen en ₡157 millones equivalente a 116 hectáreas.
La insuficiencia de agua en Guanacaste, atribuida al fenómeno del Niño, ha generado grandes pérdidas en el sector arrocero.